Honramos al doctor Jorge González Pérez: científico y humanista médico cubano
El silencio se adueña del Aula Magna de la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana. El escenario, testigo de importantes acontecimientos en la historia de la Medicina revolucionaria cubana, acoge hoy, de manera diferente, a uno de sus mejores hijos. ¡Honor, respeto, admiración, tributo eterno al hombre audaz, sencillo e inmenso profesional!
Un sitio que recoge también páginas de amor hacia las Ciencias Médicas del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, quien lo fundó en el 2002, precisamente con motivo de su visita por el Aniversario 40 del Instituto de Ciencias Básicas y Preclínicas “Victoria de Girón”.
Hasta aquí llegaron hoy el miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y del Consejo de Estado, Esteban Lazo Hernández, junto a las máximas autoridades del Partido y el Gobierno en La Habana, Liván Izquierdo Alonso y Yanet Hernández Pérez, respectivamente.
Al doctor Jorge González Pérez, fallecido este 12 de noviembre, dedican su homenaje desde el Ministerio de Salud Pública. En la primera fila, el titular del sector, doctor José Angel Portal Miranda, quien junto a su Consejo de Dirección y cuadros, evocó al destacado profesor de profesores de la Medicina Legal en Cuba.
“Así como se despide a los mejores hijos de la Patria, despedimos hoy a nuestro entrañable Popi, un hombre que décadas atrás traspasó el plano formal de un nombre, de un cargo, o de una institución, para marcar no solo el quehacer de la Medicina y la Ciencia cubanas, sino también el devenir de la historia de nuestro pueblo”, expresó Portal Miranda.
En emotivas palabras recordó que el doctor Jorge González Pérez se desempeñó “durante casi una década como Director Nacional de Docencia Médica del Ministerio de Salud Pública, donde laboró hasta el momento de su muerte, dejando una profunda huella, no solo por el respeto y la admiración que inspiraba, sino también por sus cualidades de persona honesta, altruista y consecuente”.
Más que un adiós, el Ministro dio un “Hasta siempre”, al querido y entrañable colega. Su mensaje, solemne y merecido para un cubano digno, se convirtió en un reconocimiento a su legado y un compromiso con hacer de su ejemplo, guía para las presentes y futuras generaciones de médicos, científicos e investigadores cubanos.
Al Héroe del Trabajo de la República de Cuba, revolucionario íntegro y comprometido con su pueblo, realizaron también una guardia de honor, a la que se sumaron las nuevas generaciones de galenos y sus alumnos de las casas formadoras.
Desde el mismo teatro donde el querido “Popi” recibiera la distinción Doctor Honoris Causa de la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana, trabajadores, estudiantes, profesores y directivos de la Salud Pública cubana, acompañaron a familiares y amigos. Junto a ellos, integrantes de las Fuerzas
Armadas Revolucionarias (FAR), del Ministerio del Interior (Minint), del Comité Central del Partido y otros organismos y entidades.
¡Honor, respeto, admiración, tributo eterno al hombre audaz, sencillo e inmenso profesional!