En Batabanó: un surgidero de resiliencia

Foto: Yamil Lage/AFP

“Imagínate que en el consultorio donde yo vivo nunca había subido el agua, porque es la zona más alta dentro de esa parte. Había subido nada más a 10 centímetros por encima de los rodapiés (…) La noche de Ian nosotros no nos fuimos porque no se esperaba que el huracán llegara con tanta intensidad. Habíamos puesto en alto todas las cosas pero el agua empezó a subir muy rápido. Cuando nos evacuamos, a mis hijas y a mí nos daba por la cintura. Salimos, y dejamos todo lo más alto posible”.
“Cuando nosotros regresamos, el día 29, todos los muebles, el closet, el colchón … Por suerte los electrodomésticos no los perdí, parece que habían quedado más resguardados. Yo estaba muy preocupada porque todos mis colegas estaban trabajando y yo no podía. Además de los daños en la casa, en el consultorio se habían roto las dos puertas. Gracias a Dios pronto llegó el equipo del ministerio junto a las autoridades locales y tras la defectación de mi vivienda, inmediatamente me otorgaron los colchones. Me los trajeron el viernes, y ya el sábado, yo estaba de guardia de 24 horas en el Servicio Extendido de Surgidero”.

La Dra. Titular del Consultorio 4, Linney Alibet Díaz Medina (primera de derecha a izquierda) recibiendo la mochila con insumos médicos básicos.

La Dra. Titular del Consultorio 4, Linney Alibet Díaz Medina, es una de los tantos damnificados tras el paso del Huracán Ian por la provincia de Mayabeque. Específicamente, en el Surgidero de Batabanó, las penetraciones del mar provocaron graves inundaciones, ocasionando que muchos pobladores perdieran muebles, equipos electrodomésticos, colchones y otras pertenencias.
Además de los daños a los recursos materiales de los vecinas de la comunidad, Ian afectó áreas comunes, provocando la acumulación de basuras y escombros en las zanjas de desagüe.
Con el objetivo de colaborar con las autoridades y el personal médico de la localidad, se creó un equipo de trabajo multidisciplinario del Ministerio de Salud Pública donde confluyeron especialistas de Higiene y Epidemiología, Salud Mental, Asistencia Médica, Atención Primaria de Salud, Emergencias, Enfermedades Trasmisibles, Lucha Antivectorial y Salud Ambiental.
Este grupo, encabezado por el Dr. Francisco Durán García, Director Nacional de Higiene y Epidemiología, comenzó con las labores de diagnóstico para conocer el estado de las unidades de Salud y en general las afectaciones tras el huracán.
A partir ahí y en trabajo conjunto con las autoridades locales, se brindó atención al Policlínico Municipal Docente Pascuala Restituta Rojas Cruz, proponiendo la reubicación de algunos servicios y cambios en el ordenamiento que optimizaran el trabajo de áreas como la Terapia, los Rayos X y los Laboratorios Clínico y de Diagnóstico SUMA.También se visitaron los 5 consultorios del médico y enfermera de la familia y el servicio extendido de urgencias médicas de Surgidero, los cuales afortunadamente no sufrieron pérdidas materiales. A cada uno de los consultorios se entregó una mochila que contiene insumos médicos básicos para el trabajo de campo: termómetros, medidores de oxígeno, entre otros.

En el territorio se establecieron puntos de agua potable segura para evitar la transmisión de enfermedades y garantizar el agua de consumo debidamente clorada y se distribuyeron 38 200 tabletas de cloro.

Teniendo en cuenta, además, las probabilidades de proliferación de arbovirosis y otras enfermedades transmisibles, se iniciaron en el territorio campañas de vacunación contra la Lectospirosis y la Fiebre Tifoidea, se reforzaron las labores de fumigación e identificación de focos de mosquito y se abasteció el área de Salud de medicamentos necesarios para la atención a las enfermedades con más incidencia actualmente en la zona.

El grupo de trabajo capacitó al personal de la Salud para la realización de acciones de atención psicológica y apoyo psicosocial para brindar atención a todos los damnificados.

Junto al trabajo desplegado por Salud Pública, el gobierno realizó labores de recogida de escombros, saneamiento y pintura, venta de alimentos, actividades recreativas comunitarias, espectáculos en círculos infantiles y distribución de colchones, al ser estos uno de los recursos más afectados tras las penetraciones del mar.

“A pesar del duro trabajo que se ha hecho aún existen dificultades en el área de Salud. Tenemos que completar recursos humanos y garantizar el correcto funcionamiento de los dos consultorios que se encuentran hoy fuera de su sede original. Además, tenemos que atender a todos los pacientes como personas de riesgo, porque Ian afectó a todos”, señaló el Viceministro de Salud, Dr. Reinol García Moreiro, al intercambiar con autoridades locales y provinciales y personal médico y de enfermería del territorio.

El encuentro estuvo presidido por la Secretaria del Partido Comunista de Cuba de Mayabeque, Yuniasky Crespo Baquero, la Gobernadora, Tamara Valido Benítez y el Director Provincial de Salud, Dr. Idalberto Aguilar Hernández.

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