Avanza recuperación en instalaciones de salud en el poblado El Cobre

“El poblado de El Cobre ha sido severamente afectado por el paso del huracán Melissa, pero eso no ha detenido la labor de nuestros trabajadores de la salud”, afirmó la Dra. Yanet Veranes Mustelier, Directora de Atención Médica de la DGS de Santiago de Cuba.
Al referirse a la intervención comunitaria integral desplegada en este territorio explicó que se habilitaron dos consultas médicas en el Policlínico de Urgencias y Emergencias, incluyendo una diferenciada para pacientes con síndrome febril inespecífico, “lo que permite una evaluación rápida y de calidad, evitando demoras en el cuerpo de guardia y garantizando los insumos y medicamentos necesarios”.



Además, se conformaron 11 equipos de trabajo —uno por cada circunscripción— para realizar una evaluación biopsicosocial del individuo, la familia y la comunidad, priorizando la atención a ancianos solos, personas postradas y familias en situación de vulnerabilidad.
“Nuestros médicos y enfermeras de la familia se mantienen en el terreno, reorganizando la atención sistemática y los consultorios afectados, sin detener la atención a gestantes, puérperas, recién nacidos y lactantes, que forman parte de un programa prioritario”, agregó.



En respuesta al incremento de síndromes febriles, se inició un tratamiento extradomiciliario en todo el poblado, con énfasis en El Cobre, Melgarejo y el área de Grillo, acción que se repite en horario vespertino. Asimismo ponderó que en zonas estratificadas comenzó el tratamiento intradomiciliario con medidas focales no técnicas, abatización y educación comunitaria sobre el autofocal.
“Aprovechamos el saneamiento ambiental para distribuir tabletas de cloro por vivienda, en correspondencia con los depósitos de agua, protegiendo a la población de enfermedades digestivas”, señaló.



La Dra. Yanet Veranes Mustelier también destacó que se mantiene la vigilancia epidemiológica, la pesquisa activa y termométrica, y se transmiten mensajes orientadores que permiten a la población convertirse en identificadores activos de síntomas.
Por ello, dijo que “no hay mejor escenario que utilizar la experiencia del huracán para seguir formando, generando un huracán de solidaridad, de atención continuada, de trabajo comunitario, en la situación actual que vive nuestro poblado, sin detenernos, y también atendiendo a nuestros trabajadores de la salud”.
Autor: Isabel Díaz González






