La calidad y la sensibilidad, de vital importancia en la prestación de los servicios de Salud a la población
El doctor José Angel Portal Miranda, titular de Salud Pública, convocó a trabajar con organización y oportunidad para revertir los indicadores del Programa de Atención Materno Infantil (PAMI) en Santiago de Cuba, las más compleja del país en este ámbito, y reiteró el apoyo ministerial para lograr este propósito.
Durante dos intensas jornadas, Portal Miranda intercambió con los principales funcionarios del sector y directores de los hospitales maternos del territorio sobre la responsabilidad de todos en la resolución de esta problemática que repercute en el desarrollo social y el funcionamiento del sistema sanitario en la provincia.
Aunque sabemos las carencias materiales, debemos esforzarnos más para mejorar los indicadores de esta localidad, porque la tasa actual de mortalidad no la merecen ni el pueblo santiaguero ni los profesionales del ramo, de ahí la necesidad de trabajar diferente: con organización por prioridades desde la atención primaria hasta la institución hospitalaria y la disciplina en los procesos y procedimientos establecidos.
Indicó revisar con urgencia la situación en los policlínicos, la preparación de los médicos y enfermeras de la familia y qué más puede hacerse para su capacitación, dotarlos de herramientas para conducir estos procesos en y desde la comunidad, para lo cual resulta imprescindible la identificación del riesgo preconcepcional y la llegada precoz y en mejores condiciones al sistema de las embarazadas.
Al respecto, el titular del Ministerio de Salud Pública (Minsap) encargó a la Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba la formación de manera acelerada de obstetras y neonatólogos que propicien soberanía en esas especialidades, una de las más deprimidas en el territorio, debido a su incidencia en la transformación de la actual realidad.
Sugirió seleccionar a los mejores egresados en 2022 y la creación de un contingente para impulsar su preparación tanto aquí como en otras provincias de mayor experiencia, y remarcó el papel de la Federación Estudiantil Universitaria en el proceso de captación e inserción de los futuros galenos en este grupo de vanguardia que ayudará a mejorar los indicadores del PAMI en el territorio.
Como parte de su estancia en la demarcación suroriental, recorrió el hospital materno Tamara Bunke, ya en funcionamiento –aunque no en toda su capacidad-, tras poco más de un año cerrado para una reparación capital que superó los 200 mil millones de pesos, inversión que, a juicio del ministro, debe traducirse en mejores resultados del programa materno-infantil.
Conversó con los trabajadores, en su mayoría mujeres a quienes instó a laborar enfocadas en devolver alegrías a la familia santiaguera y cubana, sin lamentar la pérdida de madres y niños, y reconoció la entrega de Ada Núñez, con más de 55 años de quehacer ininterrumpido en el área de Enfermería y 49 de ellos como jefa de ese servicio en la institución.
El ministro constató, asimismo, la gratitud de pacientes y familiares con la atención y confort de la instalación recién inaugurada y los convidó a cuidarla, en favor de la heroicidad y osadía del gobierno cubano para asumir la inversión, en medio de la situación de la Isla, empeorada por la COVID-19 y la aplicación de 243 medidas que refuerzan el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos.
También participó en la vigésimo octava sesión ordinaria de la Asamblea Municipal del Poder Popular de Santiago de Cuba en la que apuntó la necesidad del trabajo intersectorial en el seguimiento al programa materno-infantil, porque en el orden técnico le corresponde al Minsap, pero los delegados y líderes formales e informales también deben contribuir a estos esfuerzos desde las comunidades.
Este sábado, visitó el poblado Ramón de las Yaguas, ubicado en el Plan Turquino, donde compartió con los lugareños acerca de las transformaciones en los barrios vulnerables de la zona y el funcionamiento de la educación, la salud, la cultura y los servicios allí.
En su condición de diputado al Parlamento por el distrito electoral ocho del municipio Santiago de Cuba, se interesó por las condiciones vida de los habitantes, las estrategias para incrementar la producción y distribución de alimentos, la diversificación de la cooperativa cafetalera, principal rubro económico de la demarcación, situada a 45 kilómetros de la urbe cabecera.
Su periplo incluyó los consultorios del Plan Turquino de las zonas El Ramón, El Escandel y Villalón, donde intercambió con los jóvenes médicos que cumplen su servicio social en zonas intrincadas, comprometidos con brindar atención de calidad a su población, y la farmacia comunitaria y, después de departir con los pobladores verificó el arraigo y efectividad del uso de la medicina natural y tradicional en los pobladores de cualquier edad, lo cual es muy positivo ante la carencia de medicamentos genéricos, en particular los antihipertensivos y otros para el tratamiento de las enfermedades crónicas no transmisibles.
Destacó el ambiente de solidaridad y cooperación entre los habitantes de estos lares, que nunca reportaron casos de COVID-19 y hasta ahora mantienen en cero su tasa de mortalidad, e insistió en el sostenimiento de esos parámetros para el desarrollo local.
Por su desempeño al frente del ejército de batas blancas que libró una cruenta batalla contra la pandemia, el gobierno de Santiago de Cuba entregó la distinción Mérito por la Vida al ministro de Salud, quien también recibió la medalla por los 60 años de la docencia médica en el territorio y un reconocimiento especial de la Dirección Provincial del ramo, gestos que agradeció a título de todos los trabajadores del sector en la mayor de Las Antillas.
De igual manera, comprobó la gratitud de la población indómita durante la jornada inaugural del 41. Festival del Caribe, celebración que se hizo posible de modo presencial, después de tres años, por el esfuerzo del personal sanitario y científico para controlar la enfermedad causada por el virus SARS-Cov-2.
Texto: Beatriz Vaillant Rodríguez