Segundo lunes de Febrero: Día internacional de la Epilepsia
Epilepsia: Conceptos y epidemiología.
Se denomina crisis epiléptica a la aparición transitoria de signos y/o síntomas provocados por una actividad neuronal anómala excesiva o simultánea en el cerebro. Mientras que la epilepsia es un trastorno cerebral que se caracteriza por una predisposición continuada a la aparición de crisis epilépticas convulsivas o no convulsivas, con las consecuencias neurobiológicas, cognitivas, psicológicas y sociales de esta enfermedad.
En el 2013, la Liga Internacional de Lucha contra la Epilepsia (ILAE por sus siglas en inglés) considera a la epilepsia como una enfermedad cerebral que se define por cualquiera de las siguientes circunstancias:
1. Al menos dos crisis no provocadas (o reflejas) con más de 24h de separación.
2. Una crisis no provocada (o refleja) y una probabilidad de presentar nuevas crisis durante los 10 años siguientes (Lo cual debe ser evaluado por el médico).
3. Diagnóstico de un síndrome epiléptico.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que alrededor del 1% de la población mundial padece epilepsia, cálculo que equivale aproximadamente a 7 enfermos por cada 100 personas a nivel global.
Anualmente se diagnostican unos 2,4 millones de nuevos casos a nivel mundial. En América Latina se reportan, aproximadamente, 1,5 millones de personas con epilepsias farmacorresitentes, 0,5 a 0,75 millones son candidatos potenciales a tratamiento quirúrgico. A Cuba le corresponden acorde a esta estadística 330 mil casos.
Aproximadamente el 70% del total de casos de epilepsia responden a tratamiento farmacológico, por lo que es muy importante consultar a su médico de familia y éste a su vez al neurólogo de su hospital de base, ante cualquier síntoma o signo sugestivo de epilepsia.
El 30% restante de los pacientes son farmacorresistentes, es decir que no logran control de las crisis a pesar de haber tenido dos tratamientos farmacológicos suministrados en mono o poli-terapia, que hayan sido: bien tolerados, dosificados de forma correcta y seleccionados en dependencia del tipo de crisis. Este grupo de pacientes deben ser referidos a la atención terciaria de salud, en nuestro medio Instituto de Neurología y Neurocirugía (INN), CIREN (Centro Internacional de Restauración Neurológica) y Hospital Hermanos Amejeiras, con previa evaluación por los Neurólogos de los hospitales municipales y provinciales.
Los pacientes con epilepsia fármaco-resistente (EFR), a pesar de constituir un tercio respecto al total, representan el 80 % de los gastos en salud en lo que a esta enfermedad se refiere,por la frecuencia en que experimentan crisis epilépticas, por los ingresos hospitalarios repetidos, la presencia de comorbilidades, la politerapia y sus reacciones adversas, la disfunción psicológica, la estigmatización social, la calidad de vida reducida, la discapacidad, las ausencias escolares y laborales, además del riesgo incrementado de mortalidad.
¿Qué tratamientos tenemos en Cuba para los pacientes con epilepsia farmacorresistente?
La cirugía de epilepsia ha resultado ser costo efectivo superior al tratamiento médico en estos pacientes. Entre un 40 y un 80% de los pacientes operados quedan libres de crisis en contraposición comparado con el 3 al 8% si se continua solo con tratamiento médico.
El CIREN y el INN han publicado resultados quirúrgicos similares a los encontrados en el mundo, con un equipo multidisciplinario capacitado para este proceder. Es por ello que la selección adecuada y precoz de pacientes candidatos a cirugía de epilepsia es la tarea principal de los médicos y especialistas cubanos.
Contamos además con técnicas como la estimulación magnética transcraneal a baja frecuencia y recientemente en conjunto con CNEURO (Centro de Neurociencias) la estimulación percutánea del nervio vago como alternativa terapéutica, con un dispositivo producido en nuestro país, que se encuentra actualmente en prueba.
Se brindan también, consultas especializadas de Epilepsia farmacorresistente, epilepsia y mujer, neuropsicología, neuropsiquiatría, logopedia y foniatría, rehabilitación, nutrición entre otras especialidades dirigidos a estos pacientes.
Existen grupos considerados especiales por su mayor riesgo y vulnerabilidad, dígase los niños, los adultos mayores y la mujer, por su rol en la familia, su función reproductiva y las diferentes funciones que cumple en la sociedad. Todos los pacientes deben llevar seguimiento estricto, pero estos grupos lo requieren aún más.
En el caso de la niña hay que prepararla para que llegue en las condiciones óptimas a la edad reproductiva, debe asistir a consulta de riesgo preconcepcional, tomar ácido fólico junto a su medicación antiepiléptica, cuando comience su vida sexual, seleccionar el anticonceptivo más adecuado según el fármaco antiepiléptico y la dosis y planificar junto a su médico y neurólogo de base, el embarazo, en el mejor momento posible. Una vez embarazada, seguirse en consulta con su grupo básico de salud y neurólogo de base, para que se sienta acompañada y tomar las mejores decisiones para el bienestar materno fetal.
El segundo martes de febrero, Día internacional de la epilepsia es el espacio idóneo para reflexionar acerca del apoyo que brindamos a los pacientes. La epilepsia debe ser considerada como cualquier otra enfermedad no transmisible y los pacientes deben tener suficientes oportunidades laborales y sociales sin discriminación.
Exhortamos a la población a informarse sobre este padecimiento para tomar las medidas pertinentes en el control de la enfermedad y acudir a los servicios de salud ante cualquier signo o síntoma de alarma.